DIOS ES EL ÚNICO QUE PUEDE RESTAURAR TU VIDA, TU HOGAR, TU FAMILIA

Toda restauración verdadera de Dios

Contexto:

• El Reino declina: 1-9
• El reino se Divide:10-12
• El reino decae: 13-36

Introducción

• Los cambios son una necesidad.
• La gente necesita cambios.
• Los cambios son posibles
  • Reconociendo la necesidad que de ellos hay en tu vida
  • Recurriendo a medios propuestos por Dios para ello (Zc.4:6; 2Cor 5:17)
    

Desarrollo

• LA INTERVENCIÓN DEL ESPIRITU DE DIOS (15:1-2)
  • El Espíritu Santo vino sobre el siervo del Señor. v.1 Sin la presencia del E.S. nada se puede lograr
  • El Espíritu Santo dirigió al siervo del Señor para decirle al rey lo que este necesitaba (v.2)
    
• EL IMPACTO DE LA PALABRA DE DIOS (v.2-8) (hb.4:12)
  • Al oir su mensajero (v.2)
  • Al oir su mensaje (2-7)
    1. El mensaje tenía una advertencia
    2. El mensaje tenía un propósito. El mensaje de la Palabra buscaba infundir ánimo (8), producir cambios (Jn.15:7), Impartir limpieza (Jn.15:3,17), restaurar la comunión divina (8), fortalecer la esperanza (Rm.15:4)
       
• LA CONFORMIDAD A LA VOLUNTAD DE DIOS (9-15)
  • Hubo armonía entre el pueblo (9-10)“se reunieron”
  • Hubo restauración (v.11; Rm.12:1) “sacrificaron”
  • Hubo compromiso (v.12-14) prometieron buscar a Jehová de todo corazón y de toda su alma
    • Lo buscaron juntos v.10
      • Lo buscaron a través de sacrificios v.11
        • Lo buscaron a través de un pacto v.12
          • Lo buscaron por completo v.12b
            • Lo buscaron rindiendo cuentas v.13
              Lo buscaron públicamente v.14
              Lo buscaron con gozov.15
              
        • Hubo Satisfacción (v.15), el pueblo tiene gozo y alegría
          
        • Hubo Bendición (v.15), el pueblo goza de paz, todo producto de una buena relación con Dios
          

Conclusión

Dios es el único que, por medio de su Espíritu y su Palabra, puede hacer los cambios que tu vida necesita, sólo tienes que comprometerte con él y conformarte a su voluntad. Recuerda que: separados de Cristo nada podemos hacer Jn.15.5, pero con Cristo somos más que vencedores Rom.8.37-39